Publican mentiras y especulaciones infundadas sobre la muerte de Orlando Jorge Mera

Si algo ha puesto en evidencia el reciente y trágico asesinato en Santo Domingo del ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Orlando Jorge Mera, es la falta de credibilidad y criterio periodístico de algunos medios y comunicadores de República Dominicana.
Casi la mayoría, con el interés de ser los «primeros» con la noticia, pecaron en divulgar informaciones sin verificar basándose solamente en rumores o comentarios que escucharon o leyeron en sus redes sociales.
Del mismo modo, una vez confirmada la partida a destiempo de Jorge Mera, muchos de estos «comunicadores» inundaron la internet (y sobre todo los chats de WhatsApp) con videos y escritos especulativos teorizando sin compartir evidencias de cuál pudo haber sido la razón de por qué Fausto Miguel de Jesús Cruz de la Mota le disparó a su amigo de la infancia.
El problema radica en que muchas personas sin preparación periodística hoy tienen acceso a divulgar información con mayor facilidad. En minutos, cualquiera puede crear una página de internet, escribir «artículos», publicar videos en YouTube o grabar audios en un podcast. Tristemente, esto es un fenómeno muy común en la prensa quisqueyana y que quizás gremios como el Colegio Dominicano de Periodistas deberían investigar.
Son demasiados los que en República Dominicana se presentan como «periodistas» o «comunicadores», y que comparten ideas a través de internet y las redes sociales sin divulgar pruebas ni citar fuentes. Lo peor: algunos tienen miles de seguidores que creen -y comparten- lo que dicen incluso sin verificar su veracidad o a sabiendas de que pudieran empañar la imagen de la persona de quién se habla.
A título personal, soy un ferviente creyente de la libertad de prensa y la libertad de expresión; y estoy rotundamente opuesto a la censura. De forma paralela, respaldo los llamados «medios alternativos» que en ocasiones discuten temas que no son ventilados en la prensa tradicional.
Ahora bien, en mis más de 25 años como periodista, si algo he aprendido es que a la hora de divulgar cualquier información es imperativo hacerlo con credibilidad y de forma veraz.
Es cierto que los periodistas tenemos fuentes cercanas que en ocasiones nos cuentan cosas de manera privada o en condición de anonimato. Pero incluso a la hora de reportar eso es necesario dejarle saber a los lectores, televidentes y oyentes las condiciones de confidencialidad bajo las cuales se obtuvo la información.
Está claro también que a veces las mismas fuentes oficiales mienten, desinforman y esconden. Por lo que es nuestro trabajo como comunicadores tomarnos el tiempo para investigar. No obstante, todo lo que se escribe o dice debe ser sustentado. El estándar debería siempre ser obtener al menos dos fuentes confiables que verifiquen el hecho o dato reportado. Los rumores, comentarios o especulaciones no son noticia si no son verificados.
En el caso de la muerte de Jorge Mera, de 55 años, es necesario respetar los deseos de privacidad que imploró la familia le mismo día de su asesinato y esperar que las autoridades involucradas realicen su trabajo de investigar qué pasó y por qué.
Tanto la Policía Nacional como el Ministerio Público han dicho que Cruz de la Mota, de 56 años, confesó haberle disparado al hijo del expresidente Salvador Jorge Blanco (1982-1989). Pero publicar especulaciones de por qué lo hizo sin datos o testimonios precisos es un acto irresponsable que, en vez de ayudar o informar, complica aún más una situación ya complicada.
Me dolió mucho, por ejemplo, un escrito publicado el 7 de junio en un portal llamado «El Pregonero: la verdad a viva voz», titulado «Para entender el asesinato de Orlando Jorge Mera», escrito por Kelvin Ortiz Faña, y quien expone una serie de acusaciones sin sustento y sin atribuir ni a una sola fuente.
No conozco a Ortiz Faña, pero tras leer lo que escribió sobre la muerte de Jorge Mera, está muy claro de que periodista no es. Para ser honesto, jamás había escuchado de «El Pregonero», y el texto en cuestión me lo enviaron desde Santo Domingo, por lo que sospecho antes de que llegara a mi teléfono ya había sido compartido por cientos de usuarios.
En su reseña, Ortiz Faña afirma que quiere escribir sobre los detalles que supuestamente le ofrecieron, lo que él entiende es la versión más creíble de los hechos. Sugiere que una fuente -sin identificar- narró con «claridad y honestidad» lo que pasó.
Y es aquí en donde empiezan los problemas… Respeto la voluntad de Ortiz Faña de querer proteger la identidad de su «fuente». No obstante, es su deber como comunicador de al menos establecer quién es esa persona: ¿Es su fuente un vecino de Jorge Mera?; ¿un amigo en común de la víctima y el presunto asesino?; ¿un funcionario del gobierno?; ¿alguien involucrado en la investigación? El no conocer el vínculo existente entre la fuente y los involucrados en el caso automáticamente le resta credibilidad a lo que dice.
Ortiz Faña continúa diciendo que Jorge Mera, a pesar de ser un hombre que iba a la iglesia, también era «apostador»; y que Cruz de la Mota por ser «un gran comerciante» supuestamente lo respaldaba económicamente y alega que aportó a la campaña presidencial de 2020.
Entonces, pregunto, si Jorge Mera era «apostador», ¿en qué casino jugaba? o en ¿en qué apostaba su dinero?; ¿apostaba a los caballos en el hipódromo?; ¿jugaba bingo después de ir a misa los domingos?; ¿era Jorge Mera miembro de un club privado de apuestas? Si fuesen ciertas, evidenciar cualquiera de estas alegaciones sería extremadamente fácil. En todos los casinos hay cámaras y su presunta pasión por el juego se hubiese sabido mucho antes de su muerte.
Sin presentar evidencias, Ortiz Faña enumera múltiples barbaridades adicionales sobre un Jorge Mera que nadie conocía, y especula que éste supuestamente había manifestado que hablaría con el presidente Luis Abinader Corona para que en agosto próximo designara a otro funcionario como ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
La acusación más grave en el escrito de Ortiz Faña es que Cruz de la Mota supuestamente había recogido dinero de por lo menos 50 empresarios, a quienes les había prometido interceder con Jorge Mera para la aprobación de proyectos. La pregunta es: ¿Habló Ortiz Faña con algunas de esas personas que según él le dieron dinero al asesino? De nuevo, sin divulgar nombres, cuando se escribe semejante acusación es necesario establecer pruebas y decir, al menos, que esta alegación fue verificada con algunos de los involucrados.
La muerte de Jorge Mera fue un duro golpe para la sociedad dominicana en todos los sentidos. Pero no agravemos una situación tan dolorosa con mentiras y especulaciones. Los comunicadores tenemos un solo compromiso y es decir la verdad. Y para llegar ahí es necesario verificar y evidenciar lo que decimos y escribimos. Yo soy Fernando Almánzar y así veo las cosas…
Fernando Almánzar:
Periodista, orador, consultor mediático
Es un veterano periodista con más de dos décadas de experiencia en Radio, Televisión, Prensa Escrita y Medios Digitales, capaz de descifrar «temas profundos» y difíciles de entender para informar, educar y motivar audiencias hambrientas de información.
Ganador de tres Premios Emmy; el máximo reconocimiento en Estados Unidos a los profesionales de la televisión, otorgado por Academia Nacional de Televisión, Artes y Ciencias (NATAS). También ha sido galardonado por la Asociación Nacional de Publicaciones Hispanas (NAHP).
Hasta octubre de 2021 trabajó como Productor y Editor Nacional de Asignaciones en Telemundo; produciendo segmentos de Noticias de Actualidad, Inmigración, Finanzas, Salud, y otros temas de interés para «Hoy Día», el programa matutino de Noticias Telemundo.
Estudió periodismo y graduó con el honor Magna Cum Laude del City College of New York/CUNY. En ese reconocido centro universitario obtuvo una Licenciatura en Comunicaciones, Cine y Video, con una especialización en Prensa Escrita y estudios Latinoamericanos.
Empezó a trabajar como redactor en «El Nuevo Herald» y «The Miami Herald», En octubre de 1999, Fernando se unió a la familia Univision para trabajar como redactor y editor de Noticias y Finanzas, NBC Universal/Telemundo, para trabajar como Editor de Asignaciones y Planificación de la estación local en Miami, WSCV – Telemundo, actualmente labora para CNN en Español.
Mensaje de Jorge Mera a mafias y carteles “deforestadores” antes de su fallecimiento
Antes de su trágica muerte, Orlando Jorge Mera, quien había sido ministro de Medio Ambiente, dijo que desde su posición se enfrentaba a mafias y carteles “deforestadores” integradas por militares retirados y activos.
Esta declaración fue ofrecida en una entrevista realizada días antes de que fuera últimado por su amigo Miguel Cruz, donde también señaló que estas mafias estarían compuestas por dirigentes y militantes del PRM y el PLD.
También, declaró que se encuentran en zonas cercanas a las cuencas de los ríos, posición que aprovecharían para extraer materiales utilizados para la construcción, entre ellos gravilla, piedra y arena. Además, su modus operandi sería similar al del narcotráfico.
Durante el encuentro, a estos carteles, Jorge Mera envió un contundente mensaje:
“A esos grupos que se creen que son dueños del país, que sepan que nos tendrán de frente, porque no permitiremos que acaben con nuestros recursos naturales”.
Aunque el trabajo se complicaba, puesto que estos grupos tenían como informantes a colmaderos y vendedores de frutas que les avisaban cuando el Ministerio de Medio Ambiente realizaba algún operativo en la zona.
A pesar de esto, durante su gestión, el ministro revocó varios permisos que fueron otorgado de forma poco transparente.